noviembre 11, 2006
La vergüenza. Manuel Rivas
MANUEL RIVAS
EL PAÍS - Última - 11-11-2006
Informa un amigo, Permuy, que consiguió entrar en El Aaiún, la capital del Sáhara Occidental. Eran un grupo pequeño, dos parejas, y pasaron por turistas. Le pareció que tuvieron suerte en el aeropuerto. Incluso la guardia puede bajar la guardia. Informa Permuy que se hospedaron en el fantasmagórico Hotel Parador, inaugurado en el período colonial. Las playas de la provincia del Sáhara, anunció entonces triunfal el ministro, iban a ser el gran paraíso para el turismo europeo. El Aaiún se llenaría de rubias suecas. Pero quienes llegaron fueron los invasores marroquíes, después del ominoso abandono español. Esas playas son ahora embarcaderos para el éxodo. Es la nueva estrategia de los ocupantes, tres décadas después. Se hicieron con el territorio, pero no han podido tomar posesión de las mentes. Así que han renunciado a toda seducción. Apenas hay universitarios saharauis. Los nativos son apartados de los empleos fijos, deslocalizados en su localidad. A los no sumisos, se les amedrenta, y se les empuja a abandonar su país. Se les facilita desaparecer. Y a veces lo hacen para siempre, como los muchachos ahogados en octubre en fuga hacia Canarias. Unos 500 jóvenes se han ido este año del territorio ocupado. Informa Permuy que en el aire se notan los huecos de la gente que falta y que la que permanece está y no está. En El Aaiún, los barrios saharauis van tomando la forma de un gueto en su propia ciudad, cercado por controles policiales y tanquetas. El visitante se abre paso entre presencias ausentes. Ni siquiera los niños pedían la deuda histórica de golosinas. Informa Permuy que los niños del Sáhara ocupado tienen una edad de mirada de 30 años. Informa Permuy que consiguió, después de muchas peripecias, una cita clandestina con activistas de los Derechos Humanos. Le impresionaron los testimonios de tortura, y más le impresionó la firmeza pacifista entre tanta desesperación. En Internet puede verse un extraordinario trabajo de topografía virtual por medio de Google Earth. Podemos viajar por los 2700 kilómetros del "muro de la vergüenza". Un logro monumental: la mayor cárcel del mundo, pues encierra a los de dentro y a los de afuera. Informa Permuy que hoy, 11 de noviembre, hay una manifestación en Madrid por la libertad del Sáhara, convocada hace 30 años por demócratas españoles, marroquíes y saharauis.